Consumo
Siguen vigentes los contingentes para importar granos básicos sin aranceles
El gobierno anunció una campaña de concienciación para evitar especulación con los precios de los granos básicos.
El frijol es uno de los granos básicos que más ha subido de precio en el plazo de 5 años. (Foto, Prensa Libre: Hemeroteca PL).
El aprovechamiento de los contingentes para importación de granos básicos sin aranceles por parte de las empresas interesadas en traer esos productos al país aún está por debajo del 50% del total aprobado, afirmó ayer la Ministra de Economía, Gabriela García.
La implementación de los contingentes de granos básicos como arroz, frijol y maíz para importar sin aranceles en prevención de un posible desabastecimiento es una medida mencionada por el gobierno para bajar el costo de la canasta básica.
La liberación de impuesto de importación para el frijol negro, maíz blanco y amarillo y arroz con cáscara es una medida busca asegurar el ingreso de granos básicos “para que haya suficiente producto en el mercado, que no haya especulación por escasez y los precios de la canasta básica bajen”, aseveró el presidente Bernardo Arévalo.
La adjudicación de los contingentes no significa que significa que el grano ya haya sido traído al país y puesto en el mercado en su totalidad. Por ejemplo, se autorizó el ingreso de 55 mil toneladas métricas de maíz blanco, lo que entró en vigencia el 1 de mayo y solo ha sido adjudicado el 34.6% a los interesados en importar, según datos al 24 de mayo. De frijol negro, el contingente es de 15 mil toneladas métricas y se ha adjudicado un 12.2%.
Los contingentes que están vigentes desde enero de 2024, son los de maíz amarillo por 750 mil toneladas (ya se adjudicó el 33.9%), mientras que el de arroz, por 70 mil toneladas, no se ha adjudicado.
La titular del Mineco anunció que reforzará la campaña de monitoreo con la Dirección de Atención al Consumidor (Diaco) para verificar el cumplimiento de los precios de los productos de la canasta básica más consumidos.
El presidente Arévalo añadió que los guatemaltecos deberán decidir dónde comprar los productos, “favoreciendo a quienes ofrecen los mejores precios”. “Eso evitará especulación y subida de precios”, añadió.