“Dijeron si a mí no se me caía la cara de vergüenza por las inasistencias” en la “pospandemia que el sistema educativo está sufriendo, politizando la educación y desconociendo lo que en el mundo entero pasa”, dijo Silva.
“A los que se les tendría que caer la cara de vergüenza es a ellos, porque estuvieron 15 años en el gobierno, con bonanza económica y aumento presupuestal, con unanimidad en los órganos de conducción, con mayoría absoluta parlamentaria, y no fueron capaces de iniciar una transformación educativa que atendiera los problemas que la educación tenía”.
Silva sostuvo, además, que “en plena pandemia, en situación de absoluta incertidumbre”, desde el Frente Amplio se pedían “cuarentenas absolutas” y decían que “los CTI no iban a dar abasto”, mientras que la administración de la educación, “con mucha responsabilidad y con mucho temor”, “tomó la decisión de abrir los centros educativos”.
En ese contexto, agregó, “ellos y sus aliados, los sindicatos, se oponían permanentemente a que los abriéramos, y por suerte los abrimos. No fue fácil tomar esas decisiones, pero se tomaron, y hoy somos un país reconocido”.