Qué ejercicios hacer para controlar la incontinencia urinaria


Para revertir o controlar la incontinencia urinaria en las mujeres, una de las claves es poner en marcha un entrenamiento con ejercicios especiales para el suelo pélvico.

Como explica el sitio El Debate, se llama así a los músculos, ligamentos y tejidos que envuelven los órganos del interior de la pelvis manteniéndolos en una posición correcta y facilitando su correcto funcionamiento.

“Esta musculatura se ve sometida a presiones y fatiga en muchas situaciones y etapas de la vida de la mujer”, explica Cristina Orts Ruiz, doctora en fisioterapia y vicedecana del Grado en Fisioterapia de la Universidad CEU Cardenal Herrera.

Con ejercicios adecuados, estas situaciones podrán atenuarse.

Los ejercicios de Kegel para fortalecer el suelo pélvico

La clave de esta práctica, como indica el sitio de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, es adquirir la técnica correcta para apretar, sostener y relajar los músculos del piso pélvico.

La secuencia es la siguiente

  • Ubicarse en una posición cómoda y relajada (puede ser parada, sentada o acostada).
Los ejercicios de Kegel tienen como objetivo fortalecer los músculos del piso pélvico. Foto Shutterstock.Los ejercicios de Kegel tienen como objetivo fortalecer los músculos del piso pélvico. Foto Shutterstock.
  • Tomar consciencia de la ubicación de estos músculos.
  • Contraerlos durante tres segundos. Si siente un “apretón” en el área vaginal o rectal, estarán contrayendo los músculos correctos.
  • Liberarlos y relajar por completo la zona.
La incontinencia urinaria femenina puede controlarse con ejercicios correctos Foto Shutterstock.La incontinencia urinaria femenina puede controlarse con ejercicios correctos Foto Shutterstock.

Para obtener resultados, realizar tres series de 10 a 15 repeticiones por día.

Los cuidados para tener en cuenta: prestar atención a apretar el estómago, los muslos ni otros músculos, ya que podrá generarse una presión sobre la vejiga y facilitar el escape de orina.

Ante cualquier duda, un profesional de la salud podrá dar las indicaciones correctas. Además, un médico podrán recomendar tratamientos con aparatología o microcirugías que reviertan el problema.

Hay que tener en cuenta que esta información es orientativa y no sustituye la consulta médica.

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