Este viernes en Ni que fuéramos, María Patiño ha revelado un encuentro entre Antonio David Flores y Rocío Carrasco en un juzgado, centrado en una querella por alzamiento de bienes que pesa sobre él.
Según Patiño, la atmósfera se tornó tensa cuando “Antonio David se quedó mirándola fijamente y le aguantó la mirada. A partir de ahí, las cosas se empezaron a complicar”.
La periodista ha afirmado además que la situación legal se ha vuelto más compleja para el ex guardia civil: “Lo que en principio iba a ser una querella por alzamiento de bienes, y la pena iba de uno a cuatro años de prisión, se ha convertido en una acusación de delito continuado de alzamiento de bienes al haberse producido los cobros a nombres de terceros de una forma y durante un espacio de tiempo prolongado”.
“Por esta razón, la jueza ha pasado el caso a la Audiencia Provincial y la pena podría ser de seis a nueve años de prisión“, ha explicado la presentadora del programa.
La intensidad de la vista entre ambos protagonistas no ha pasado desapercibida para la tertuliana, que ha señalado que la hija de Rocío Jurado mantuvo la mirada hasta que su exmarido la desvió.