Cuántas y qué frutas debo comer al día para perder peso y quemar calorías


Las frutas son una fuente inagotable de nutrientes que incluyen vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes, imprescindibles para el funcionamiento adecuado de nuestro organismo

Gracias a su contenido de fibra, las frutas promueven una digestión saludable y ayudan en el control del peso al proporcionar saciedad y regular el tránsito intestinal.

En el caso de los antioxidantes, combaten los radicales libres promoviendo la salud a largo plazo y reduciendo el riesgo de patologías crónicas como las enfermedades cardíacas, la diabetes y el cáncer.

Es sabido que incorporar una variedad de frutas en nuestra dieta diaria es clave para disfrutar de estos beneficios y mantenernos saludables y activos con el paso de los años. Y más aún si se busca perder peso y bajar calorías.

Cuántas y qué frutas se deben comer al día para perder peso y bajar calorías

Las frutas son parte de una alimentación saludable. Foto: iStock.Las frutas son parte de una alimentación saludable. Foto: iStock.

“El consumo regular de frutas ayuda a acelerar el metabolismo y utilizar las reservas de grasa acumuladas, favoreciendo la pérdida de peso de manera gradual y sostenible”, explica el sitio Tua Saúde.

Al respecto, en una dieta diseñada para perder peso es fundamental incorporar frutas que sean bajas en calorías, pero ricas en nutrientes esenciales.

Este portal especializado en salud recomienda consumir entre 2 y 3 porciones de frutas diferentes al día como parte de una dieta baja en calorías y acompañada de actividad física regular.

Incorporarlas en las meriendas o como postre en las comidas principales contribuye a mantenerse saciado y evitar la tentación de recurrir a opciones menos saludables, advierte Tua Saúde.

Las frutas aliadas

Estas son algunas de las frutas más recomendadas para perder peso “en el sentido de aportar menos azúcares y, sobre todo, calorías, y también en base a su contenido en agua y fibra”, indica la nutricionista Leyre López Iranzu al portal Cuidate Plus:

Frutos rojos como la fresa, la frambuesa y los arándanos contienen  menos de 60 calorías cada 100g. Foto: Clarín.Frutos rojos como la fresa, la frambuesa y los arándanos contienen menos de 60 calorías cada 100g. Foto: Clarín.

POMELO (42 calorías cada 100g): bajo en calorías y rico en vitamina C, se destaca por su capacidad para aumentar la saciedad

MANZANA (52 calorías cada 100g): excelente fuente de fibra que ayuda a mantener los niveles recomendados de azúcar en sangre. Además, su alto contenido de agua la vuelve muy saciante.

FRUTOS ROJOS (57 calorías cada 100g): nutritivos y con una buena cuota de fibra y antioxidantes, las fresas, los arándanos y las frambuesas son una excelente opción para incluir en una dieta para perder peso.

KIWIS (61 calorías cada 100g): bajos en calorías y con buenas dosis de fibra y vitamina C. Además, su contenido de antioxidantes y otros nutrientes contribuyen a una mejor digestión.

Según los nutricionistas, para controlar el apetito a este listado se le pueden añadir las peras (ricas en fibra y agua), la piña (baja en calorías y rica en vitamina C y enzimas digestivas) y las naranjas y mandarinas (con alto contenido en vitamina C y fibra).

El poder de las frutas

Las frutas son fuente de nutrientes esenciales para el sistema inmunológico y la salud cardiovascular. Foto: Shutterstock.Las frutas son fuente de nutrientes esenciales para el sistema inmunológico y la salud cardiovascular. Foto: Shutterstock.

Versátiles y variadas, las frutas están disponibles durante todo el año, lo que permite disfrutar de diferentes sabores, texturas y colores. Desde las dulces y jugosas naranjas hasta las refrescantes manzanas, hay frutas para todos los gustos.

Incluir frutas en una dieta para perder kilos es altamente recomendable por varias razones asociadas con la salud. Por un lado, son una excelente fuente de vitaminas, minerales y antioxidantes, esenciales para el funcionamiento óptimo del organismo. Estos nutrientes son vitales para el sistema inmunológico, la salud cardiovascular y la salud ósea, entre otros.

También son naturalmente ricas en fibra dietética –tanto soluble como insoluble-, necesaria para mantener la salud digestiva, promover la regularidad intestinal y prevenir el estreñimiento. La fibra también contribuye a la sensación de saciedad, lo que ayuda a controlar el apetito y la ingesta calórica total.

Por su alto contenido de agua, favorecen la hidratación, un factor imprescindible para la salud en general y para el correcto funcionamiento de numerosos procesos fisiológicos.

Finalmente, su bajo contenido en calorías las convierte en un alimento ideal para aquellos que buscan controlar su peso o perder unos kilos. Al elegir frutas como refrigerios o como parte de las comidas se pueden satisfacer los antojos de dulce sin agregar muchas calorías adicionales a la dieta.

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