Recibió de Cesc Fàbregas y le pegó cruzado para hacer estéril la estirada Stekelenburg, minuto 116 de la prórroga en la final del Mundial de Sudáfrica 2010. Gol y gloria para Andrés Iniesta, que marcó el tanto más importante en la historia de España. Una diana para recordar como lo será desde ahora el fútbol del jugador de Fuentealbilla (Albacete), que con 40 años y después de marcar una época con el balón atado a los pies, anunciará próximamente su retirada. El aún futbolista ha anunciado esta mañana, a través de las redes sociales, un acto para el día 8 de octubre —fecha que remite a su apegado dorsal— para hablar de su futuro.
Pretendía Iniesta desde Dubái, donde está apurando sus últimos pases y quiebros, seguir jugando un poco más, pero podría no ser así. Todo empezó en un torneo de Brunete, cuando de niño desató un bum que no se pudo contener. Crecido en el Albacete y firmado en 1996 por el Barcelona, se desarrolló en La Masia a fuego lento, como también se instaló en el primer equipo, validado por Louis Van Gaal y después arañando oportunidades con Rijkaard. Su facilidad para descontar rivales, su pie único para el pase y capacidad de proteger el esférico pronto hicieron del centrocampista —aunque también actuó de extremo, por más que no le gustaba tanto— una pieza indispensable para el Barcelona, un cromo más de un equipo que tocó la gloria con Guardiola al frente y con futbolistas canteranos como Xavi, Puyol y Valdés de compañeros, después aderezados por otros como Piqué, Busquets, Pedro…. Un equipo de oro que llevó a Iniesta a levantar cuatro Champions, tres Mundiales de Clubes, nueve Ligas, tres Supercopas de Europa y siete de España, y seis Copas del Rey. Con España, del mismo modo, también lo ganó todo, pues participó de la mejor versión del equipo, conquistador de la Eurocopa 2008 y 2012, además del Mundial.
Iniesta quiere seguir, según sus palabras, en el mundo del fútbol, pues desea sacarse el carnet de entrenador. “Evidentemente, me gustaría volver al Barça en algún momento de mi vida, porque así lo siento, pero decir ahora el momento o de qué manera no lo sé yo, ni lo sabe nadie, vamos a ver cómo van transcurriendo las cosas durante este tiempo y después veremos dónde estamos”, aseguró hace unas semanas en un evento en nuestro país. Seguro que en Can Barça y con Laporta al frente, encontrará su sitio.