El papa Francisco asistió a la cumbre que nuclea a las democracias más ricas del mundo, conocida como el “Grupo de los siete”. Bergoglio pidió a los líderes del G7 regular la inteligencia artificial (IA).
El foco en la inteligencia artificial
Ante la primera ministra italiana Giorgia Meloni, el papa Francisco calificó a la inteligencia artificial como un instrumento “fascinante” y “tremendo”: “En un drama como el de los conflictos armados, es urgente replantearse del desarrollo y la utilización de dispositivos como las llamadas armas autónomas letales para prohibir su uso”, afirmó.
“Ninguna máquina debería elegir jamás poner fin a la vida de un ser humano”, agregó. Además, exigió “acción política”.
En otros temas, el G7 criticó a China por enviarle armas a Rusia y exigieron que cumpla con las reglas internacionales sobre comercio. En la cumbre, además, se generó polémica por la ausencia en la declaración final de una referencia directa al derecho al aborto.
En su declaración final, los países asistentes al G7 de Borgo Egnazia (Apulia, Italia) piden un alto al fuego inmediato en Gaza, la liberación de todos los rehenes y “un aumento significativo y sostenido de la ayuda humanitaria”. A continuación, el G7 promete “apoyar” a Ucrania “durante el tiempo que sea necesario” y declara que Moscú debe poner fin a la “guerra de agresión y pagar por los daños que ha causado”.