Coopeservidores jugó con ‘el sudor del ahorro’



Don Mario Valverde Montoya, filósofo y exprofesor en la Universidad Estatal a Distancia, es un escritor frecuente de nuestra sección “Cartas a la columna”. Desde hace tiempo, ha venido haciendo observaciones sobre la elección de representantes de Coopeservidores, la celebración de asambleas y el servicio al cliente.

El 9 de mayo, cuatro días antes de la intervención ordenada por el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif), don Mario se quejaba por cumplir dos años sin recibir excedentes: “Los excedentes son la parte esperada por los asociados, producto de nuestros ahorros y créditos. Cualquiera que sea la suma, sin embargo, no llegará. Y lo peor es que en Coopeservidores no me dan explicaciones. Uno se entera por terceros. Llegar a una asamblea donde se toman las decisiones es imposible. Las cooperativas mantienen una toma de decisiones muy restringida y poco comunicativa. Uno se pregunta si los gerentes y puestos altos recortan sus salarios, financiados con nuestro sudor del ahorro. Las malas políticas financieras las pagamos los asociados”, escribió en su carta.

Don Mario, afiliado a Coopeservidores desde hace casi una década y a otras cooperativas, tenía razón. Este domingo, en una nota de La Nación titulada “Gasto en salarios de cúpula de Coopeservidores es el más alto del sector cooperativo”, se respondió su última pregunta.

No se lo recortaban. Se lo aumentaban. Sabemos que solo en el 2023, un grupo de 19 personas, de las cuales 10 son miembros del Consejo de Administración y 9 conforman la alta gerencia, se repartieron ¢1.433 millones en remuneraciones, de conformidad con los estados financieros auditados, publicados en el sitio web de la entidad y de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef). Si la cifra se dividiera por igual, equivale a ¢6.285.087 mensuales para cada uno.

Aunque no sea una irregularidad, resulta ofensivo un festín de tal naturaleza en una organización con un gran volumen de créditos malos, una administración catalogada de negligente por el Conassif y una desvinculación de Fitch por detectar “riesgos elevados” con base en información financiera del 2023.

Don Mario, dedicado ahora a impartir talleres de escritura creativa a adultos mayores, es uno de los 138.000 ahorrantes afectados.

Él resumió en menos de 500 caracteres parte de lo que al interventor le tomará 30 días determinar. Quizá ahora se preste más atención a quienes financian estas cooperativas con el “sudor del ahorro”.

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La autora es editora de Opinión de La Nación.

Afectado por intervención en Coopeservidores

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